¿POR QUÉ HAY VACUNAS QUE CAUSAN LAS ENFERMEDADES QUE SE SUPONE QUE DEBERÍAN PREVENIR?

Muchas personas notan que parecen enfermarse con la enfermedad contra la que están siendo vacunadas (por ejemplo, la gripe o la COVID) después de recibir una vacuna.

Si bien esta asociación es frecuentemente ridiculizada por la profesión médica, existe más de un siglo de evidencia que demuestra que ocurrió para una variedad de enfermedades (por ejemplo, hay mucha literatura al respecto para la fiebre tifoidea, la tuberculosis y la polio), hasta el punto en que anteriormente se la denominaba "provocación de enfermedad".

Desafortunadamente, dado que el conocimiento sobre la provocación de enfermedades disminuiría las ventas de vacunas, este suele desaparecer de la memoria de la profesión médica, lo que lleva a desastres casi idénticos ocurridos décadas después, que desconcertaron a los médicos de la época (por ejemplo, analizamos cómo ocurrió esto con la polio).

La provocación de enfermedades parece deberse a que el sistema inmunitario se desvía hacia el antígeno de la vacuna en lugar de realizar su función natural. Dado que con frecuencia dependemos del sistema inmunitario para controlar infecciones latentes o recientes en fase de incubación, esa desviación inmunológica puede provocar que una infección existente se descontrole.

En este artículo revisamos muchos ejemplos de cómo esto sucedió con infecciones en el pasado y destacamos cómo este mismo proceso puede hacer que la vacunación aumente el riesgo de sufrir una infección grave de gripe, una infección grave por COVID, una reactivación de la enfermedad de Lyme o una infección por VPH que progrese a cáncer de cuello uterino.

Un artículo de Midwesterndoctor que hay que tomar en cuenta para comprender que toda la vacunología no es sino un intento de comprender y utilizar el sistema inmune en beneficio de la cura y prevención de enfermedades que no termina de dar problemas que se ocultan.

Se obvian los efectos adversos en pos de no perjudicar el negocio que sustenta la industria farmacéutica y la investigación que hacen pero nos venden que las vacunas, como todos los medicamentos, producen efectos secundarios.

Las vacunas no son medicamentos, son productos farmacéuticos usados para prevenir contraer enfermedades y son administrados a personas sanas y por tanto el nivel de riesgo de efectos adversos es diferente a cualquier medicamento que es usado para evitar un mal mayor.

(Fuente: https://www.midwesterndoctor.com/; visto en https://t.me/bycpoornamidam/)