LA CAÍDA MUNDIAL DE AMAZON WEB SERVICES PONE EN EVIDENCIA LA PRECARIEDAD DEL PAGO ELECTRÓNICO

Este blog lleva meses -y continuará haciéndolo- abogando por el pago en efectivo frente al dinero de plástico. El argumento más poderoso a favor del "cash" lo presentó ayer la caída de la nube del gigante Amazon, que causó fallos en numerosas operaciones en línea y paralizó pagos en datáfonos, cajeros y bizum

El mundo digital entró en pánico este 20 de octubre de 2025. A la ya conocida lista de afectados por la caída AWS -que incluye a gigantes como Canva, Duolingo, Fortnite y Prime Video- se sumó un impacto de magnitud crítica: la paralización de los sistemas de pago en España.

Comercios, restaurantes y todo tipo de negocios se vieron obligados a volver a la era del efectivo. El fallo masivo en los datáfonos (TPV) convirtió la compra diaria en un rompecabezas logístico.

Fuentes del mercado confirmaron que la incidencia se extendió al corazón del sistema financiero. Grandes entidades como CaixaBank y Santander, así como el servicio de transferencias inmediatas Bizum, experimentaron serios problemas de funcionamiento.

El pago en efectivo no es solo libertas. Es también operatividad, como se comprobó ayer. Y como, probablemente, vuelva a ponerse de relieve más temprano que tarde ante la inexistencia de ningún plan B respecto a la dependencia de las grandes tecnológicas extranjeras.

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