sábado, 24 de agosto de 2024

LA “SINGULARIDAD” DEL F.E.M. CADA DÍA MÁS CERCA



La “singularidad” de la que tanto habla el Foro Económico Mundial (F.E.M.) generalmente se refiere a un concepto relacionado con el avance exponencial de la tecnología, especialmente en el contexto de la inteligencia artificial (IA) y la automatización. Este término es utilizado para describir un punto en el futuro (no tan lejano) donde el progreso tecnológico avanzará tan rápido y tan profundamente que cambiará radicalmente la civilización humana.

Pero, ¿qué significa la “singularidad” tecnológicamente hablando?

La “singularidad” se basa en la idea de que la tecnología, especialmente en campos como la computación, la IA, y la biotecnología, está avanzando a un ritmo vertiginoso. Esto significa que los cambios (a mejor o a peor) de todo lo relacionado con nuestras vidas están sucediendo muy rápidamente.

Uno de los elementos centrales de la “singularidad” es el desarrollo de una inteligencia artificial general (IAG), que es una IA que puede realizar cualquier tarea cognitiva humana. Se espera que una IAG pueda mejorar y rediseñarse a sí misma, lo que llevaría a una inteligencia que superaría con creces la capacidad humana.

Evidentemente, la llegada de la “singularidad” tendrá un impacto transformador en la sociedad. Esto incluye cambios radicales en la economía, el empleo, la ética, la moral y, en general, un cambio radical en el estilo de vida humano.

Si bien es verdad que las nuevas tecnologías avanzadas podrán resolver problemas complejos como enfermedades, hambre, desigualdades sociales, etc., también plantean riesgos significativos como la deshumanización, la pérdida del libre albedrío y, por supuesto, que estas tecnologías sean utilizadas para conseguir el control absoluto y la esclavitud total de la humanidad.

Este tema, que es de vital importancia para todo el planeta, sin embargo, no está siendo objeto de debate en ningún foro que represente a toda la humanidad. Sólo algunos privilegiados futuristas y tecnólogos lo discuten como, por ejemplo, Ray Kurzweil, defensor de la idea de que la “singularidad” llegará en las próximas décadas, en contradicción con otros más escépticos que señalan que los desafíos y riesgos éticos, sociales y técnicos impedirán que se alcance una verdadera “singularidad”.

Hablemos entonces de Ray Kurzweil.

Ray Kurzweil (ingeniero de inteligencia artificial de Google) escribió el libro titulado “La singularidad está cerca: cuando los humanos transcienden la biología”. El él describe el futuro que han imaginado para nosotros los tecnócratas de Silicon Valley: la fusión de los humanos con la Inteligencia Artificial (IA).

En su libro, Ray Kurzweil dice que se espera que la IA supere a la inteligencia humana colectiva en cualquier momento (según él, más o menos para 2029). También afirma que en el sector de la biotecnología se hará cargo de todos los ensayos farmacéuticos, que reemplazará a los médicos y automatizará los trabajos. En definitiva, Kurzweil enumera todas las formas en que el ser humano será reemplazado. Lo que traducido al román palidino significa que los nanobots en nuestro cerebro se encargarán de que la frase de Klaus Schwab “no tendrás nada y serás feliz” sea una realidad.

Este libro, publicado en 2005, predijo con precisión absoluta todos los eventos que hemos vivido en los últimos 19 años. Por lo tanto, es tremendamente preocupante pensar qué es exactamente lo que estas personas tienen en mente para nosotros, ya que todo lo que predijeron ha sucedido con notable precisión.

Como era de esperar, Kurzweil apoya los 17 objetivos de la Agenda 2030 de desarrollo sostenible, de los cuales 13 están respaldados por la nanotecnología.

Pero el tema más inquietante que aborda Kurzweil es el referente a la nanotecnología de autoensamblaje, que es la base de la agenda tecnocrática transhumanista del Foro Económico Mundial (FEM) y, por tanto, la herramienta a utilizar para esa transformación.

Según denunció el portal “La Quinta Columna”, después de analizar y examinar detenidamente los viales de las “vacunas” Covid-19, los viales contienen óxido de grafeno y nanotecnología de autoensamblaje. Aseguran que con las “vacunas” se inyectaron nanobots controlados por IA a través del arma biológica Covid-19. Siguiendo con sus investigaciones, más tarde encontraron lo mismo en todo tipo de inyectables (otras vacunas, anestesias odontológicas, etc). Por lo tanto, aseguran que estos nanobots ya están introducidos en nuestros cuerpos para, según ellos, escanear todo nuestro cerebro, fisiología y vete a saber qué más.

Pues bien. Dicho esto, es curioso que ya en 2005 Kurzweil se pronunciara en el mismo sentido: “En la década de 2030 alcanzaremos el tercer puente de extensión radical de la vida: nanobots médicos con la capacidad de realizar de forma inteligente el mantenimiento y reparación a nivel celular en todo nuestro cuerpo…. El cuarto puente para poder hacer una copia de seguridad de todos los archivos mentales digitalmente será la tecnología de 2040... Una vez que escaneemos esta información con suficiente precisión seremos capaces de replicarla en sustratos digitales. Esto significa que incluso si se destruyera el cerebro biológico no se extinguirá la identidad de la persona, que podría alcanzar una vida útil casi arbitrariamente larga copiándose y volviéndose a copiar para guardar copias de seguridad."

Kurzweil continúa: “en un segundo experimento, sustituiremos gradualmente cada sección de su cerebro por una copia digital conectada a sus neuronas restantes a través de una interfaz cerebro-ordenador..." Y termina diciendo: “No habrá distinción, post-Singularidad, entre humanos y máquinas o entre realidad física y virtual”.

Para ponerte los pelos como escarpias, ¿verdad? Pues a esto es a lo que se refiere Yuval Noah Harari (gurú del FEM) cuando dice que el ser humano es hackeable.

El FEM está hostigando al mundo entero para que las economías y las sociedades se preparen para los cambios disruptivos que estos avances tecnológicos van a traer. Tratan de convencernos de que confiemos en la tecnología más que confiamos en nosotros mismos. Y amén que lo están consiguiendo.

Hoy en día la tecnología es el nuevo dios de nuestra sociedad. Sin embargo, son muy pocos los que se plantean cuestiones como: ¿qué es verdaderamente la inteligencia artificial? ¿Quién o quiénes están detrás de esta tecnología? ¿Con qué fin se está desarrollando? ¿Es segura y fiable? Y, lo más importante de todo: ¿debemos dejar nuestras vidas en sus manos, tal y como estamos haciendo, con el peligro que eso conlleva?

Y para muestra un botón. Acabamos de ser testigos de cómo el viernes 19 de julio de 2024 Microsoft sufrió una caída de su sistema a nivel mundial. Esta caída afecto a líneas aéreas, hospitales, supermercados, etc. que se vieron obligados a suspender su actividad dejando a miles de usuarios sin servicio.

Si los seres humanos somos realmente inteligentes, cosa que a veces dudo, ¿cómo hemos podido dejar nuestras vidas en manos de una tecnología tan frágil? En mi opinión, depender prácticamente 100% de un sistema tan incierto no es que sea demasiado inteligente.

Aclaremos una cosa. Por mucho que nos digan los impulsores de estas tecnologías la ciberseguridad no existe. Ni antivirus, ni firewall, ni encriptación ni gaitas. No hay nada seguro en el mundo cibernético. Hay que ser ciego para no ver que todos los días se producen hackeos y robos de datos por doquier. Eso por no hablar de cómo los servicios públicos y privados son sistemáticamente secuestrados por ciberdelincuentes.

Las personas que trabajan para las élites desarrollando estas nuevas tecnologías no sé si son conscientes de las consecuencias no deseadas de lo que están haciendo, poniendo en manos de psicópatas el arma más poderosa para esclavizar y destruir a toda la humanidad.

Hace más de un siglo un puñado de banqueros decidió que iban a ser los dueños del mundo. Desde entonces llevan tejiendo un plan: crear una red global del dinero y un conglomerado de organizaciones e instituciones supranacionales para acaparar todo el poder, mantener engañado al “populacho” e implementar el sistema de esclavitud consentido mejor logrado de la historia de la humanidad.

Aviso a navegantes. Si la humanidad no reacciona, estos maniacos con su inteligencia artificial, su Agenda 2030 y su política "Net Zero" (cero emisiones de CO2) en unas décadas habrán reducido la biodiversidad natural y la población mundial de una manera drástica. Su objetivo es reemplazar a la humanidad por una versión cyborg-transhumanista: una mente colmena aberrante sin cerebro que sólo se moverá a golpe de algoritmos.

Naturalmente, se necesita mucha comedura de coco para lograr que una especie inteligente como la nuestra acepte su propia autodestrucción. Pero si lo analizamos bien, veremos que todos los avances tecnológicos de los últimos 70 años han sido creados y diseñados para ir en esa dirección. Y esa dirección no es otra que la de un mundo posthumano.

Bueno, pues esta y no otra es la verdadera “singularidad” que quiere imponer a la humanidad el FEM. Y sí, evidentemente, por desgracia cada día está más cerca.

(Visto en http://pepeluengo.blogspot.com/)

No hay comentarios:

Publicar un comentario