martes, 30 de diciembre de 2025

CADA VEZ SE LE VE MÁS EL PLUMERO A LA AGENDA



Jake el Gordo era un mando intermedio de la familia Luchese, de la Cosa Nostra de Nueva York.

El Don de su "familia" pensaba que Jake los iba a traicionar con el FBI.

No era así, tal pensamiento era pura paranoia, Jake era leal.

Pero el Don ordenó matarlo. Sus hombres lo esperaron a la salida de una estación de servicio y le dispararon con todo lo que tenían. Jake el gordo recibió 12 disparos, sin embargo su sobrepeso evitó que las balas llegaran a los órganos vitales.

En el hospital lo pusieron a dieta, y lo hacían realizar ejercicios de rehabilitación.

Tony bajó 40 kilos, y decidió contar todo lo que sabía al FBI.

Maldición dijo el Don, Jake no podía ni respirar bien cuando lo atacamos, ahora está mucho más sano.

El sociología se lo llama la ley de los efectos no calculados. Estos efectos son muy comunes en los sistemas complejos. Por ejemplo en la economía.

Cuando la Agenda decidió en septiembre del 2019 encerrar, aterrorizar y forzar a "vacunarse" a la población, con inyecciones experimentales de ARNm calculó el poder y el dinero que les daría.

No calcularon la fortaleza y extensión de la resistencia que se fue generando.

No calcularon que la inoculación de las otras vacunas caería en un 50%.

La cantidad de trombosis, infartos, inflamación cardíaca, parálisis faciales y malestar general que produjeron y producen los compuestos inyectados fue inmensa.


(Hacer click sobre la imagen para ampliar)

Eso rompió la confianza, muchos padres dejaron de ver a los médicos como dioses de guardapolvo blanco y a los periodistas como defensores de la verdad y la justicia.

Y dejaron de ver a las madres que afirman que sus bebés eran normales hasta que les metieran cantidad de vacunas como "locas anticiencia".

Ya no se censuran tanto sus videos mostrando a sus bebés riendo, jugando y parloteando el día antes de los pinchazos.


Se rompió la confianza, y no importa que los periodistas cacaren que son seguras y efectivas, se les nota el cheque saliendo de sus bolsillos del saco.

No importa que los tragacionistas afirmen que somos unos conspiranicos con sombrero de aluminio, se les nota el miedo a saber que los gobiernos y farmacéuticas no los cuidan, que los quieren tan muertos como a nosotros. O al menos enfermos.

Ya se acerca el jaque mate, y la Agenda lo sabe.


El lanzamiento de la operación cepa Perro del Infierno, el año pasado, generó aburrimiento, la Cepa Frankestein, risas.

Nadie les cree y sus mentiras resultan cada vez más patéticas.

Horacio Rivara

1 comentario:

  1. Todo juego "seguro" tiene su riesgo, aunque se ignore o se infravalore.
    En este mundo no hay nada 100% seguro... depende.

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