EL NUEVO PAPA, DEMOSTRANDO A QUIÉN SIRVE

Y no parece que sea al Espíritu Santo, a no ser que éste desarrollase hace cuatro años una inusitada prisa por reunir en torno a sí a los crédulos y los obedientes. El cardenal Prevost, una elección cuestionable por más de un motivo, es la continuación de Francisco en cuanto a propagandista del globalismo de Davos. El control de las mentes pasa también por su sometimiento espiritual al jefe del paraíso fiscal más eficaz de cuantos existen sobre la faz de la tierra. Reflexione el creyente acerca de lo que avisa Mateo 6, 24, y desconfíe de los lobos con piel de cordero, por más que sepan fingir una idoneidad que está bien lejos de la realidad.